Tanto el hipertiroidismo como el hipotiroidismo son muy perjudiciales para el cuerpo humano. Sin embargo, en términos de la dificultad del tratamiento y los efectos secundarios de los medicamentos, el hipotiroidismo es relativamente fácil de tratar.

Durante la perimenopausia, las mujeres pueden experimentar molestias físicas y psicológicas debido a las fluctuaciones o disminución de los niveles de hormonas sexuales. Además de los trastornos menstruales como ciclos menstruales irregulares, retraso de la menstruación y aumento o disminución del volumen menstrual hasta la menopausia, los síntomas principales incluyen una serie de síntomas vasoconstrictores y neuropsiquiátricos, como sofocos, sudoración, irritabilidad, ansiedad, palpitaciones emocionales e insomnio. Estos son el síndrome perimenopáusico, también conocido comúnmente como síndrome de la menopausia.

Las hormonas tiroideas desempeñan un papel crucial en la regulación de muchas funciones corporales, entre ellas el metabolismo, el crecimiento y el desarrollo. La glándula tiroides produce dos hormonas principales, la triyodotironina (T3) y la tiroxina (T4), que se liberan en el torrente sanguíneo y se transportan por todo el cuerpo. Estas hormonas se unen a receptores específicos en las células y los tejidos, donde regulan la expresión genética y la actividad celular.